Pollo de campo se denomina a aquél que se cría libremente a campo abierto, es éste el que tiene que buscar su alimento, el cual suele consistir en granos, lombrices, verdeo, entre otros. Por su parte, el pollo de criadero es alimentado con alimentos balanceados de acuerdo con los requerimientos nutricionales según su genética y su edad.
Asimismo, el pollo de criadero o industrial no sólo debe tener una alimentación adecuada en proteínas (aminoácidos), hidratos de carbono, fibras, grasas, vitaminas y minerales, sino que también debe vivir en un medio ambiente adecuado. Un pollito bebé de un día de vida requiere una temperatura ambiente de 30ºC, la cual debe ser mantenida así dentro del galpón a pesar de que afuera del mismo la temperatura sea menor a 0°C. A la inversa, en verano el pollo adulto debe tener una temperatura ambiental que no exceda los 26ºC. Si estas condiciones no se cumpliesen, el ave sufriría un estrés que impediría que exprese al máximo su potencial genético de crecimiento. La avicultura industrial es un emprendimiento comercial, por lo que es de especial interés que el ave logre desarrollarse plenamente, lo cual está íntimamente ligado a las óptimas condiciones ambientales y de alimentación.
La alimentación con una ración equilibrada ayuda a los pollos a desarrollarse de tal manera que alcanzan un peso ideal mucho antes que los criados al aire libre. Es por este motivo que la carne de los pollos industriales o de criadero resulta más tierna que aquélla de pollos criados al aire libre. Estos alcanzan el peso deseable a edades más avanzadas, en las que ya son aves adultas con algún grado de desarrollo sexual, lo cual determina que la carne sea más dura. Los beneficios del uso de alimentos balanceados de óptima calidad para aves pueden entenderse pensando en los beneficios que reporta este tipo de alimentación en el caso de las mascotas domésticas, las cuales han visto acentuadas sus mejores características de conformación y pelaje desde el uso de alimentos balanceados en su dieta.